La bahía de Triganá es un gran ejemplo de la diversidad del Chocó, que no solamente cuenta con playas de arena oscura sino también con otras de arena blanca. En Triganá el mar tiene varios tonos de azules y verdes, y barreras coralinas que albergan bancos de peces de colores. Por eso este es un buen destino para quienes practican el snorkel y el buceo.