COLOMBIA
Este viaje fascinante empieza en Leticia, la capital del Departamento del Amazonas. Para llegar a esta ciudad es necesario tomar un vuelo desde Bogotá con una duración de poco menos de dos horas. Desde allí, hay salida por vía fluvial hacia los diferentes senderos en los que fácilmente se realiza esta hermosa actividad que deja una experiencia de profunda paz y reconciliación en el corazón y las más hermosas fotografías en las que la protagonista es la naturaleza.
Debido a que en el Amazonas habitan más de seiscientas especies de aves, su observación no es difícil. El Parque Nacional Natural Amacayacu y Puerto Nariño son dos muy buenos sitios para ver bandadas de más de veinte especies de loros, por ejemplo, algunos ejemplares de trompetero como el Aligrís (Psophia Crepitans). Más adentro en la selva vive el colibrí Esmeralda del Chiribiquete (Chlorostilbon Olivaresi), endémico del Amazonas.
En la “Capital Mundial de la Paz” encontrarás diferentes hoteles para hospedarte y poder realizar un recorrido por la ciudad. Conocer la historia, disfrutar de la gastronomía y de la amabilidad de sus gentes, es el abrebocas ideal para empezar a conocer las aves amazónicas más representativas. Con el atardecer sobre el río Amazonas, llega el cantar y la bulla de miles de pericos Brotogeris y Golondrinas Puroúreas al Parque Santander. También los Halcones Colorados y las Tángaras Cabecinaranjas, son muy populares. Los visitantes tienen la posibilidad de subir a la cúpula de la iglesia Catedral Nuestra Señora de la Paz donde se ubica el campanario de 33 metros de altura para observar el espectáculo de la llegada de la bandada de loritos al atardecer.
El Parque Nacional Natural Amacayacú forma parte de las 56 áreas protegidas del sistema de Parques Nacionales Naturales de Colombia que se encuentran próximas al río Amazonas. Fue creado en 1975 para proteger el Patrimonio Natural Nacional de 293.500 hectáreas de la superficie del trapecio amazónico y cuenta con un centro de visitantes con fines educativos y recreativos.
Este escenario selvático es el hábitat de especies únicas, entre las que se encuentra el mono más pequeño de América, el Tití Leoncito, una especie de mariposas gigantes de color azul platinado y también la flor de loto más grande del mundo llamada la Victoria Regia. Adicionalmente cuenta con cerca de cinco mil especies de plantas y árboles, en los que habita cerca de un tercio de las aves del país.
El Parque ofrece numerosas actividades ecoturísticas entre las que se encuentran diferentes senderos ideales para realizar el avistamiento de más de más de quinientas especies de aves.
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El puente de madera del parque te llevará a la comunidad indígena Tikuna por medio de un sendero de siete kilómetros en los que te darás gusto observando mamíferos (especialmente monos), plantas y aves únicas en el mundo.
Visitarás lugares como el lago Tarapoto y las islas de los Monos y Mocagua. La experiencia de pasar por el puente vegetal colgante llamado -“Puente del Dosel”- es una actividad única, en la que pasear por entre las copas de los árboles a treinta metros de altura, permite la vista majestuosa de la imponente Selva amazónica.
Para llegar a este santuario emblemático de la flora y fauna del país, es necesario partir del Puerto del río Amazonas y tomar una lancha rápida. El recorrido dura aproximadamente dos horas y llega hasta la Quebrada Matamatá. Es importante conocer los horarios de traslados pues se suspenden después de las cuatro de la tarde. Dentro del centro de visitantes también existe el servicio de alojamiento compartido en hamacas o camas
Puerto Nariño es el municipio más cercano al Parque Nacional Natural Amacayacú, ubicado a dos horas de Leticia por río Amazonas. En el recorrido hacia este Destino Turístico Sostenible, se pueden observar especies como el Gavilán Cangrejero (Buteogallus Urubitinga), la Avefría de Cayena (Hoploxypterus Cayanus), el Telecotes Llanero, Martín Pescador y muchas más.
Allí podrás encontrar hoteles especiales y expediciones particulares para los aventureros de la selva. Esta población de aproximadamente siete mil habitantes -donde no circulan los automóviles-, se ubica a orillas del río Loretocayu, hogar de los delfines rosados.
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En las tardes, en el casco urbano, se dejan ver especies como los Loros Colicortos, las Tángaras Turquesas, los Tucanillos Pichí de Banda Roja (Pteroglossus Castanotis), entre muchas otras. Existen diferentes opciones para recorrer la ribera del río y conocer los complejos lagunares de la zona. En el mirador de la casa en árbol a veinte metros de altura, se pueden observar muchas otras especies coloridas que se funden en el paisaje selvático que atraviesa el río.
Las comunidades indígenas de Mocagua y San Martín de Amacayacú prestan servicios de alojamiento y de guías ecoturísticos. Para llegar hasta sus territorios se debe partir por vía fluvial, y se ubican a aproximadamente a 1 hora y 30 minutos de Leticia por diferentes vías.
Recorriendo el “sendero de la selva”, de la mano de guías indígenas, podrás realizar canotaje diurno y nocturno por los diferentes ríos y observar además de numerosas especies de aves, como el Curutié de Parker, el Curutié Rojiblanco, el Trapratoncos de Zimmer, la Amazona de Lomo Rojo, el Tirijil de Johannes, delfines y fauna asociada al ecosistema acuático.
Las rutas por la Selva Amazónica te permitirán encontrar escenarios mágicos en los que podrás vivir experiencias únicas, cercanas a la naturaleza. Es en este espacio, llamado el “Pulmón del Mundo” en el que el canto y colorido de las múltiples aves que le adornan, será el inicio o la continuación de la pasión por la ornitología. ¡Ven al Amazonas y supera tus expectativas sobre la naturaleza!.
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