La alegría de la Navidad invade Salamina los primeros días de diciembre cuando se celebra la Noche del Fuego, una festividad que nació en 2001 como homenaje a la Virgen de la Inmaculada Concepción, patrona del municipio. Durante este evento las calles permanecen adornadas con faroles de colores y se realiza un concurso de iluminación entre los habitantes.