Por un segunda, imagina que pasaste la noche en una carpa, que abres las telas que hacen de puerta y los primeros rayos del sol inundan todo. A lo lejos, un paisaje despampanante y familias de carpinchos alimentándose de la hierba cubierta de rocío. Esa es la escena que les espera a los visitantes de los albergues ecológicos del departamento de Casanare, a los que se puede acceder desde los poblados de Yopal, Pore y Paz de Ariporo.

Si Villavicencio se considera la puerta de entrada a los llanos, Yopal es el porche delantero. El área que rodea Yopal es un paraíso para los amantes de la naturaleza y cautivará a los fotógrafos con sus paisajes alucinantes. Allí, encontrarás ranchos ganaderos tradicionales que se funden con humedales donde abundan las aves.

Antiguamente, la ganadería era el único espectáculo de la ciudad, pero los vientos de cambio también soplaron por aquí, y la conservación se ha convertido en una prioridad importante. Por eso, los lugareños apuntan a preservar ecológicamente muchas partes valiosas de las granjas además de resguardar otras tierras de la zona.

Inspirados por este movimiento tan contagioso, los emprendedores locales comenzaron a adaptar las enormes haciendas para recibir a los visitantes que se interesan por la naturaleza, y ahora hay varios lugares donde los viajeros pueden vivir la experiencia del safari latinoamericano.

Y vaya que es una experiencia única! De día, te la pasarás observando anacondas, monos y osos hormigueros o intentando sacarle una foto al escurridizo jaguar. Pero cuando cae el sol, el ambiente se llena de abundantes comidas tradicionales y dicen presente los acordes y los bailes de la cultura local.

De hecho, se cuentan con los dedos de las manos los destinos que combinan naturaleza y cultura en un maridaje tan perfecto como las llanuras de la Amazonía-Orinoquía colombiana.

 

Yopal, Casanare
Foto: ProColombia

 

Atracciones y experiencias

Piscina Natural La Aguatoca

Rodeada de naturaleza, esta profunda piscina natural recibe, sedienta, las aguas cristalinas de un pequeño arroyo que fluye sobre una pequeña cascada. ¿Qué mejor forma de refrescarse y recargar pilas que zambullirse en ella?

Vida al aire libre

Mirador de la Virgen de Manare

Al este de la ciudad, encontrarás una ladera que se hizo popular entre los lugareños para hacer ejercicio. Además, cuenta con un gran mirador que ofrece vistas panorámicas de Yopal y las llanuras que se extienden más allá.

Mirador

 

 

Cascada La calaboza

A menos de tres kilómetros de la ciudad, hallarás esta hermosa piscina natural redonda, en cuyas aguas verde esmeralda podrás sumergirte y disfrutar de su pequeña cascada y los bosques que la rodean. Los fines de semana es un lugar bastante concurrido por los residentes locales, pero durante la semana es maravillosamente tranquilo.

Cascada

Detalles prácticos

Alojamiento

Si bien Yopal cuenta con una amplia variedad de hoteles muy accesibles, la mayoría de los viajeros prefiere hospedarse fuera de la ciudad, en uno de los albergues ecológicos rurales que se pueden encontrar en Casanare, ya que brindan la oportunidad de meterse de lleno en la naturaleza y la cultura de las llanuras.

Llegada

Yopal posee un moderno aeropuerto muy bien ubicado en las afueras de la ciudad desde donde salen vuelos regulares a Bogotá y, con menos frecuencia, a Bucaramanga. Por vía terrestre, Yopal se conecta con el departamento de Boyacá de los Andes colombianos del este por una pintoresca carretera de montaña de donde nace una autopista que se dirige hacia el sur hasta Bogotá. Llegarás a esta ciudad tras un viaje de unas siete horas en total.

Fotografías de nuestros visitantes