COLOMBIA
Una parte importante de la historia de Colombia se conserva en la Casa Museo Francisco José de Caldas, bautizada en homenaje al científico payanés y prócer de la Independencia.
En este sitio del centro de Bogotá, cuyo documento más antiguo data de 1689, vivió hacia 1806 el llamado “Sabio Caldas”. Esta casa fue declarada Monumento Nacional y Patrimonio Histórico en 1944 y se abrió como museo al público en 1985.
Francisco José de Caldas nació en Popayán el 4 de Octubre de 1768, hijo de españoles (criollo) y perteneciente a una clase social ilustrada. Fue pieza clave para el plan del incidente denominando “El Florero de Llorente”, que desencadenaría la Independencia aquel 20 de Julio de 1810.
Amante de la libertad e ingeniero de profesión, sus amigos le pusieron el epíteto de “El Sabio” debido a su interés en la ciencia, en la cartografía, la botánica, el periodismo, la astronomía, la geografía y en la investigación de todo tipo.
Fue un hombre culto que hizo carrera militar y perdió la vida tras ser capturado por el ejército realista por colaborar con la causa independentista. Lo fusilaron el 28 de octubre de 1816 en la plazuela de San Francisco, hoy Parque Santander de Bogotá.
Vivió en esta Casa con su esposa María Manuela Varaona y sus hijos durante los primeros años de la República desde el segundo semestre de 1810, entre otros motivos por su cercanía con el Observatorio Astronómico Nacional, lugar dónde le gustaba pasar mucho tiempo.
Ubicada en la carrera octava con calle sexta, cerca al Palacio de Nariño, esta construcción de estilo colonial fue restaurada a partir de 1980 bajo la dirección de la Fundación para la Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural Colombiano del Banco de la República. A partir de 1986, su administración está a cargo de la Escuela de Ingenieros Militares.
La Casa es actualmente un museo dedicado a la investigación, preservación y a la divulgación de la vida y obra de este Prócer de la Independencia, patrón del Arma de los Ingenieros del Ejército Nacional Colombiano.
Las características de la arquitectura de la casa permiten conocer aspectos fundamentales de la época. La Real Cédula establecía que las propiedades particulares debían conservar un aspecto sobrio que careciera de superficialidades.
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Dos plantas de techos bajos divididas en varios salones, son el escenario de una exposición permanente de objetos personales del Sabio Caldas que dan cuenta de la vida y obra de este personaje importante de la historia de Colombia.
La fachada cuenta con una puerta de madera acompañada a lado y lado por dos ventanas también talladas en el mismo material. En el segundo piso se observan tres hermosas ventanas con balcones y el techo de teja de barro.
Al interior de la casa, la Sala de Ingeniería, la Sala Caldas y la Sala de Conferencias, son los nombres de los recintos en los que se puede observar manuscritos, libros, dibujos, muebles, objetos militares, dibujos botánicos y hermosas pinturas que recrean los episodios de la historia nacional y que ilustran el universo de las ideas de Francisco José de Caldas.
Un mural de seis metros de alto muestra los pisos térmicos de nuestra topografía, frente a un recorrido interactivo que incluye la sabiduría botánica y los pasos del caudillo.
La vida y obra científica del Sabio Caldas se encuentra expuesta en el recorrido por la casa, un trayecto que muestra el amor por el territorio colombiano y por su gente en el que se pueden encontrar también sus libros, esos libros que aumentaron su admiración por el movimiento de la Ilustración.
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Una placa de mármol sobre el dintel de la puerta principal de entrada, lleva gravada una inscripción en latín realizada en 1881 por el filólogo Rufino José Cuervo que traduce: “Consagró esta casa con su vida inmaculada, la ennobleció con el cultivo de las ciencias y al morir por la patria, la legó a la veneración de sus conciudadanos”.
¡Visita la casa de Francisco José de Caldas y conoce el espíritu de generosidad y de amor a la ciencia y compromiso con la patria, con el que vivió este noble hombre, que ha dejado una huella imborrable en la historia de nuestro país!
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